Adviento Tiempo de Espera

Vivir bien el Adviento, siete consejos

Se paciente
El Adviento no es Navidad. No lo vivamos de manera que el 26 de diciembre ya estamos cansados de la Navidad. “Adviento” significa “venida” y es un periodo de expectativa alegre. Lo mejor está por venir: Cristo.

Haz oración
No puede haber preparación para la Navidad sin oración. Si nos cuesta orar, este es el tiempo para fortalecer nuestra vida de oración, es el tiempo para acostumbrarnos a orar en familia.

Confiésate
La confesión es esencial en el tiempo de Adviento. No solo limpia nuestro corazón para que Jesús pueda habitar en él, sino que también nos da la gracia para no volver a pecar. ¿Por qué no fijar una fecha para llevar a toda la familia a confesarse?

Asiste a misa
La mejor preparación es recibir la eucaristía, pues la Navidad no solo es un recuerdo del nacimiento de Jesús, sino también una preparación para cuando nos encontremos con Cristo. Si esto no es posible por la pandemia, la oración con las lecturas de la misa es importante.

Despréndete de algo
Todo tiempo de espera y preparación debe ir acompañado de un desprendimiento de lo que no es esencial para enfocarnos en lo que en verdad vale la pena. La clave es preguntarnos qué cosa o costumbre nos está distrayendo de Dios y nuestros seres queridos, y desprendernos de ella durante este tiempo.

Ayuda a tu prójimo
El Adviento también es un tiempo para salir de nosotros mismos y poner atención a las necesidades de otras personas en nuestra vida, de encontrar a Cristo en el prójimo. Una manera de hacerlo es ayudando de forma material o espiritual a una persona o familia que lo necesite: llamarles para preguntarles cómo están, ayudarles a que tengan los medios necesarios para celebrar la Navidad de manera especial, etc.

Aprovecha las tradiciones
Los signos exteriores nos ayudan a prepararnos. En Adviento es costumbre poner las luces, el pesebre, el árbol de Navidad… Todo esto nos puede ayudar a entender que en realidad viene algo grande. Investiga el significado cristiano de estas prácticas, para que así te puedan ayudar a prepararte para la venida de Jesús.

Deja un comentario